martes, 9 de septiembre de 2008

La admiración de los peruanos, un incentivo extra para el seleccionado

El público local, maravillado por Messi y las otras figuras, recibió con elogios al plantel; a diferencia de la fecha pasada, el estadio lucirá lleno.

Por Martín Castilla (diario LA NACIÓN de Bs. As.)
Enviado especial

LIMA.- Cuando está por terminar la jornada laboral un hombre con la vida marcada por el aire del Pacífico, apura el paso, cruza en zancos la avenida José Lorca y se sorprende por un grupo de niños peruanos que grita por la Argentina, pero mucho más por Messi. Le llama la atención el eco de cientos de voces que se desparraman, como una letanía, por esa geografía conocida para su vida cotidiana en el barrio Miraflores. De pronto, un bullicio se extiende en la puerta del hotel Marriott y se desata un alboroto. Todos se entusiasman con la presencia de las figuras del seleccionado argentino. El ómnibus del plantel acaparará miradas de admiración hasta que la voz firme de una seguridad algo obsoleta anunciará el clásico: "Atrás, no se puede pasar".

El frenético ritmo en el que se desenvuelven los taxis limeños no se detiene ni se inquieta ante otro día gris y brumoso. Acostumbrada a concentrar las miradas donde le toca jugar, la selección se insertó en esta ciudad que se encuentra encandilada con el partido de mañana (a las 23.30 de nuestro país). La Argentina trajo consigo una tendencia que viene de arrastre: interrogantes futbolísticos, aumentados en la última actuación frente a Paraguay, y comentarios sobre posibles desavenencias entre Alfio Basile y algunos jugadores. Factores que no suman para un plantel que necesita corregir errores.

Una campaña publicitaria imponente cubrió de gigantografías la vía pública de Lima. Manda la imagen de Messi y de Agüero mostrando las medallas doradas conseguidas en Pekín. "El partido frente a los campeones olímpicos, no puedes faltar", dicen los carteles. A partir de ahí, no es extraño cruzarse con chicos enfundados en la camiseta albiceleste del delantero rosarino. En los puestos callejeros, juntos con las casacas de Perú, de los clubes Alianza Lima o Universitario, también flamean las camisetas de Barcelona o de Boca. Estas últimas, con el nombre impreso de Riquelme, más otras en las que simplemente se lee Carlitos o Tevez, ausente por la expulsión en el ultimo partido.

En la atención a la prensa del conjunto peruano, los colegas no paraban de preguntar sobre la posibilidad de hacer una entrevista con Messi. La comparación con Diego Maradona tampoco faltó en este caso y todos los enviados de la Argentina tuvieron que salir a hablar del tema. Hasta el DT del Perú, José Del Solar, aportó un condimento más al recordar la marca que hizo Luis Reyna sobre Maradona, en el 1-0 con el gol de Juan Carlos Oblitas, el 23 de junio de 1985, durante las eliminatorias para el Mundial de México 86. "Si marcara a Messi como Reyna lo hizo con Maradona, me quedaría con uno menos a los cinco minutos. O como lo hizo Gentile con Maradona en el Mundial 82... No puedo hacerle marca personal a Messi; es evidente que si anulas a un jugador en la Argentina te sale otro", opinó el Chemo en el salón de conferencias del complejo La Videna. "Argentina siempre viene como favorito, pero este partido no será fácil para ninguno de los dos. Messi llega en un momento fantástico, es una situación que no se puede negar. Nos obligará a controlarlo muy de cerca y mantenernos siempre atentos", alertó Nolberto Solano, el capitán.

Dos veces enfrentó Messi a Perú en el equipo mayor. La primera fue por las eliminatorias para Alemania 2006, en su primer partido en el Monumental, el 9 de octubre de 2005; ese día fue la figura del conjunto dirigido por entonces por José Pekerman en el éxito por 2-0. Pero la más recordada por los peruanos es el 4-0 de la Copa América de Venezuela: esa noche, Messi marcó uno de los tantos.

Quizá por añorar lo que no se tiene, el pueblo peruano, más allá de su deseo de ganar el encuentro de mañana, demuestra una clamorosa admiración por el seleccionado argentino. En el triunfo ante Venezuela por 1-0, unas 22.000 personas presenciaron el cotejo en el estadio Monumental, que tiene capacidad para 60.000 espectadores. Pero ese acompañamiento quedó más devaluado al conocerse que los organizadores tuvieron que salir a regalar localidades para evitar un escenario casi vacío. ¿Qué pasará frente a la Argentina? Todo lo contrario. Aunque no se entregaron números oficiales, se espera un estadio colmado. En un amplio recorrido por diversos puntos de Lima, las imágenes de la televisión muestran que la mayor demanda de entradas se registró en los distritos populares de la capital. Así como en los puntos de la empresa Teleticket, en la que se formaron nutridas filas dispuestas para comprar boletos. Pero lo curioso es el valor del alquiler que tienen los palcos-departamentos tan característicos del estadio, cuyo valor alcanza los 250 dólares para ver el partido y luego pasar la noche como si se tratara de un hotel.

"¡Hay que parar a Messi!", exclaman algunos medios, como el diario deportivo Líbero . Sucede que esta ciudad se prepara para vivir un partido con rivales observados a la distancia. Un lugar que un fútbol postergado por años, como el peruano, les reserva a los jugadores admirados.

  • 7 triunfos seguidos obtuvo el equipo argentino frente a Perú; no pierde desde el 21 de junio de 1997, por la Copa América, en Sucre, cuando cayó 1-2.


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